El Partido Revolucionario Institucional (PRI) no está pasando por sus mejores momentos, ya que después de que José Narro Robles renunciara a su candidatura por la dirigencia del partido y saliera de la institución política. Ahora es Rogelio Montemayor, quien fuera gobernador del estado de Coahuila, quien tomó la decisión de renunciar al tricolor.
El motivo de esta salida, expresado por medio de una carta, se debe a la decisión de Narro, ya que para él, era “la única esperanza de poder reconstruir al PRI, alguien que habría podido guiar al partido en un proceso de cambio renovación que le habría permitido a esta organización política recuperar la confianza de los electores”.
Añadió que “la ciudadanía en las pasadas elecciones de 2018 mandó al PRI y a sus dirigentes y representantes con poder político un mensaje claro, muy fuerte: Basta de corrupción, impunidad e inseguridad; basta de soberbia y desapego de las necesidades populares”.
