Uno de los más grandes enemigos de las redes sociales es, sin duda, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, que en muchas ocasiones ha lanzado todas las armas con las que cuenta para intentar callar a sus críticos en espacios como Twitter y Facebook.
Es bien sabido que el presidente ecuatoriano ha presionado, también, a los medios de comunicación que no se han sometido al control que instauró desde su llegada al poder en enero de 2007.
Conociendo el actuar de Correa en contra de la libertad de expresión, poco sorprende que la organización Ecuador Fundamedios haya documentado que de abril a julio de este año, hayan sido denunciadas 292 cuentas de Twitter que pertenecen a críticos del gobierno ecuatoriano.
Esas cuentas fueron denunciadas supuestamente por publicar “información privada”. Y según Ecuador Fundamedios, la empresa española Ares Rights ha sido la encargada de hacerle el trabajo sucio al gobierno de Rafael Correa; ya que ésta se encarga de poner las denuncias para que las cuentas señaladas sean dadas de bajas temporal o definitivamente.
Cabe recordar que Correa y su gobierno han sido acusados, en otras ocasiones, de mandar a su ejército de bots para contrarrestar las críticas en su contra que se escriben en redes sociales como Twitter o Facebook; espacios donde la sociedad que no está de acuerdo con su presidente manifiesta su descontento.
¿Y quién hace algo en contra de este ataque en contra de la libertad de expresión que lleva a cabo Correa y su gobierno?
¿Ése el el modelo que muchos quieren implementar en México; donde quien no piensa como tal o cual líder debe ser denunciado?
