Donald Trump, expresidente de Estados Unidos, se declaró inocente de los cargos que se le imputan en el estado de Georgia, pues se le acusa de intentar manipular los resultados electorales de 2020, año en el que perdió frente al demócrata, Joe Biden.
Donald Trump, quien planea lanzarse una vez más como candidato presidencial por el Partido Republicano en las elecciones del próximo año, sigue afirmando su inocencia en los tres procesos penales que enfrenta.
Durante la mañana de este jueves 31 de agosto, el equipo legal de Donald Trump se presentó ante el tribunal de Fulton en Georgia, donde entregaron un documento donde el también empresario, se declara no culpable de los 13 delitos que se le imputan.
En este mismo documento presentado, Donald Trump afirma que renuncia libre y voluntariamente a su derecho de estar presente en una de las lecturas de cargos formales dentro de la corte, otorgándole así a sus abogados el poder de decisión.
La lectura de cargos contra Trump y contra otros 18 imputados, estaba programada para llevarse a cabo el próximo 6 de septiembre en una audiencia pública, lo que le otorgaba permiso a la prensa de asistir, sin embargo, al declararse no culpable, Trump no tendrá que asistir a Georgia,
Para poder imputar al expresidente, la fiscal Fani Willis, usó la ley RICO (por sus siglas en inglés), la cual se emplea contra integrantes de la mafia, ya que ayuda a garantizar que los líderes criminales y sus aliados rindan los delitos que se les imputan.
Recordemos que la semana pasada Donald Trump fue encarcelado en el condado de Fulton por apenas 20 minutos, gracias a que pagó una fianza de 200 mil dólares para quedar libre. La foto de su ficha policial rápidamente le dio la vuelta al mundo.
Además del proceso que enfrenta en Georgia, Trump enfrenta otro en Nueva York por los pagos que hizo para silenciar a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels, quien en 2016 aseguró que habían tenido un amorío.
Otro de sus cargos lo enfrenta en Florida, pues se descubrió que guardó papeles clasificados en su mansión de Mar-a-Lago una vez que terminó su mandato presidencial. Sin embargo, uno de sus cargos más significativos es su responsabilidad por el asalto al Capitolio en 2021, ya que sus simpatizantes quisieron interrumpir el proceso legislativo que certificaba la victoria de Joe Biden.
