Poco se habla de esto, pero torturan a trabajadores del Tren Maya con 12 horas al día para cumplir con el capricho de AMLO.
De acuerdo con EMEEQUIS, los empleados del Tren Maya trabajan todos los días, de lunes a domingo, de las seis de la mañana a las seis de la tarde; esto, con el objetivo de mantener su plaza laboral y cumplir el plazo exigido para la ejecución de este megaproyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los trabajadores fueron reclutados en gran número entre comuneros indígenas de Chiapas y Yucatán. Incluso les prometieron 12 mil pesos mensuales, cuatro mil por semana, pero solo les dan mil quinientos y ni siquiera les pagan regularmente.
El sitió también informó que los trabajadores han denunciado que “los retrasos en la obra propician que el gobierno federal presione a las empresas contratistas para que se termine en los tiempos que pide el presidente, por lo que las horas de trabajo se multiplican, pero sin paga adicional”.
Además, los sindicatos que tutelan los contratos laborales de la obra poco hacen para defender a sus supuestos protegidos, pero sí disputan con ferocidad las cuotas de los obreros.
Dichas organizaciones son “la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y de Confederación Autónoma, CATEM, central ésta última de Pedro Haces Barba, el sindicalista que hasta hace poco ocupaba una curul en el Senado de la República en el grupo parlamentario de Morena”.
Algunos comuneros indígenas, de Valladolid, Yucatán, relataron que les ofrecieron más de cuatro mil pesos semanales, hospedaje y alimentación por parte de la CATEM. Ante esta oferta, dejaron su pueblo a sus familias, y se vinieron a trabajar a las obras del Tren Maya con la esperanza de tener por una vez en la vida ingresos suficientes para sus hogares.
“Pero no nos pagan, apenas el sábado pasado nos dieron mil quinientos pesos, dormimos en el monte y hay días que no podemos comer, ya queremos regresar a nuestro pueblo”, contaron.
Carga de trabajo genera despidos
Otro problema que enfrentan es que a partir del pasado mes de diciembre les aumentaron la carga laboral, bajo el argumento de los responsables de la obra, de que sí van a tener vacaciones, por lo que tienen que trabajar para cubrir los días que no asistirán.
Sin embargo, las mentiras ya colmaron a los empleados, pues los despidos están a la orden del día, tanto de aquellos que residen en comunidades cercanas como de los que vienen de otros estados de la República.
Cabe señalar que los retrasos y el intento de evitar que los costos de la obra se incrementen, han derivado en presiones para los trabajadores por parte de las empresas contratantes, y esa condiciones de trabajo, semejantes a las que prevalecían antes de la consagración de los derechos laborales en la Constitución de 1917.
La 4T presume sus megaproyectos, pero se hace de la vista gorda cuando
torturan a trabajadores del Tren Maya con 12 horas al día de labores para cumplir el capricho de AMLO.
Con información de EMEEQUIS
JZ
