Reyes Rodríguez Mondragón, magistrado presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), afirmó que el Poder Judicial ha sido garante de los equilibrios de la democracia, por lo cual hizo un llamado a seguir fortaleciendo el sistema electoral del país.
Durante la presentación del libro “Justicia Constitucional Electoral y Nuevos Paradigmas del Derecho“, Rodríguez Mondragón dijo que la justicia electoral y el Tribunal Electoral deben seguir cumpliendo con su papel de consolidar la democracia mexicana a través de su interpretación y del respeto al principio de legalidad.
Esa labor, destacó, debe darse en un contexto en el que el Poder Judicial ha tenido que ser garante de los equilibrios propios de una democracia plural, que busca ser incluyente y en la que también persiste la desigualdad en muchos aspectos, no solo respecto de las minorías.
Sin embargo, puntualizó que el desequilibrio en la competencia político-electoral todavía se puede observar en algunas entidades, además de que aún persisten malas prácticas, por lo que el Tribunal Electoral tiene que ser capaz de seguir respondiendo a las exigencias de combatir y sancionar esas malas prácticas.
“No debemos permitir que se erosione la confianza en los Poderes Judiciales y mucho menos en las elecciones, pues esa confianza en las instituciones y en los procesos electorales es lo que permite que nuestra democracia sea funcional, que sea adecuada para responder a las demandas de la ciudadanía“, subrayó.
Tribunal Electoral tiene un compromiso en seguir construyendo la confianza de la ciudadanía
Por otro lado, señaló que el reto del TEPJF es juzgar de manera imparcial, con independencia tanto de los poderes públicos como de los fácticos.
“No debe extrañarnos porque así es en cualquier democracia, donde la separación de poderes tenga una expresión viva y el rumbo de la justicia electoral debe seguir cumpliendo con su papel de consolidar la democracia mexicana a través de su interpretación”, señaló.
Y añadió: “El Tribunal Electoral, pues, tiene un compromiso en seguir construyendo la confianza de la ciudadanía, de los partidos políticos, de los actores políticos y por eso, nuestro reto es seguir juzgando de manera imparcial con independencia, con independencia tanto de los poderes públicos, como de los poderes fácticos y por ello hemos procurado que las sentencias guarden congruencia o sean coherentes y en ese sentido, el valor del precedente es fundamental“, sostuvo.
Por último, expuso que las razones que motivan las decisiones, así como el sustento en las reglas del juego democrático que son emitidas por los legisladores se respetan, pero también hay espacios de omisiones legislativas o espacios de interpretación que obligan a que las decisiones del Tribunal Electoral tengan que definir cuál es la significación de la ley.
“El dinamismo de la interpretación siempre genera tensiones, tanto para la certidumbre que esperan los actores, como para la relación entre el Tribunal Electoral y el Poder Legislativo“, reconoció.
Ya agregó: “Yo diría que no debe extrañarnos porque así es en cualquier democracia, en donde la separación de poderes tenga una expresión viva y que el rumbo de la justicia electoral debe seguir cumpliendo con su papel de consolidar la democracia mexicana a través de su interpretación, por supuesto a través del respeto al principio de legalidad“.
Con información de La Silla Rota y La Crónica
MSA
