Reyes Rodríguez Mondragón, magistrado presidente del Tribunal electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), afirmó que el 2024 se vislumbra como un año que redefinirá el sistema político mexicano.
En ese sentido, advirtió sobre los enemigos de la democracia como la opacidad, las amenazas a la autonomía y la corrupción.
Por ello, puntualizó que las instituciones necesitan de la ciudadanía como un socio principal para defender su autonomía, su independencia.
“La opacidad es un enemigo de la democracia; las amenazas a la autonomía e independencia de las instituciones que tienen que ejercer un contrapeso, que tienen que impartir justicia bajo esos principios es otro enemigo de la democracia; la corrupción, sin duda, es uno de los principales enemigos de la democracia y para combatir la corrupción hay que tener la casa abierta”, expresó.
Por ello, enfatizó que los juzgadores deben asumir sus labores con mayor rigor para evitar que una decisión errónea desencadene un proceso de erosión y pérdida de confianza en las instituciones y el proceso electoral.
“Sabemos que el 2024 se vislumbra como un año definitivo, como un punto de inflexión que redefinirá el antes y después del sistema político mexicano, por lo menos de su configuración presente y en el mediano plazo. Nuestro trabajo, el arbitraje de sus salas regionales, de la sala superior, nuestras decisiones tendrán un peso trascendental en el curso de nuestra nación”, dijo.
Al participar en la segunda reunión de colaboración institucional con las salas regionales, aseguró que los jueces electorales deben demostrar que son capaces de pacificar los conflictos y mantener la estabilidad política.
“Tenemos claro que nuestra misión es la estabilidad política de la democracia en México. Para eso debemos seguir mostrando que somos capaces de pacificar los conflictos, que somos capaces de resolver disputas electorales brindando un marco seguro y justo”, dijo.
Señaló que en tiempos actuales de desencanto democrático y de fenómenos de polarización es fundamental que prevalezca la justicia abierta.
Por ello, subrayó que la justicia abierta es una política que permite a las instituciones combatir a los principales enemigos de la democracia.
Asimismo, refirió que el TEPJF es una institución pilar en la construcción de la democracia en el sistema democrático, además de que es referente de imparcialidad, de neutralidad e independencia, por lo que enfatizó que seguirá defendiendo la democracia.
“Las instituciones necesitan de la ciudadanía como un socio principal para defender su autonomía, su independencia y para tener un contexto de exigencia a su imparcialidad, en conclusión y atendiendo a la otra vertiente de por qué en contextos actuales de desencanto democrático y los fenómenos de polarización afectiva es importante la justicia abierta, porque es una política que permite combatir a los enemigos de la democracia”, dijo.
Con información de La Razón y MVS Noticias
MSA
