Superdelegados se quedan con control de programas sociales

Dentro de los diversos temas que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, tocó por la mañana se destacó la intervención de los “superdelegados” en los gobiernos estatales.

Por ello, Obrador aseguró que estos no tendrán la facultad de intervenir de manera técnica en cuestión de seguridad pública ya que su principal función será enfocarse en temas de desarrollo social.

Ante dicha aclaración Alejandro Moreno, gobernador de Campeche, hizo hincapié en que serán ellos quienes puedan coordinar y convocar a las fuerzas armadas, así como el mando naval en caso de estados que colindan con costas.

Estas declaraciones surgieron a raíz de que los gobernadores de todo el país lograron llegar a un acuerdo en el que rechazan la inclusión de los superdelegados ya que consideran que es únicamente su gobierno quien puede intervenir y controlar las instituciones de seguridad pública.

Es por ello que tanto el gobernador de Chihuahua, Javier Corral junto con su homólogo Jaime Rodríguez Calderón, gobernador de Nuevo León, coincidieron con el presidente que el problema de estas nuevas figuras no es la aportación o intromisión en temas de seguridad, el inconveniente ocurre porque no son expertos en la materia, lo cual resulta muy riesgoso.

No obstante es posible encontrar una característica en común, la gran mayoría los superdelegados dictaminados por el nuevo gobierno: son contendientes perdedores en las pasadas elecciones, situación que podría beneficiar a una posible candidatura al gobierno de los estados. Casos como el de Carlos Lomelí en Jalisco o Delfina Gómez en el Estado de México son algunos ejemplos.