¿Siguen celebrando? Peso mexicano ya es la peor moneda de mercados emergentes

Lo mejor es que no celebren, pues el peso mexicano ya es la peor moneda de mercados emergentes. De vuelta a la realidad en Palacio Nacional

¿Siguen celebrando? Peso mexicano ya es la peor moneda de mercados emergentes
Foto: 24 Horas

Lo mejor es que no celebren, pues el peso mexicano ya es la peor moneda de mercados emergentes. De vuelta a la realidad.

Apenas unos días después de que la moneda mexicana alcanzó su máximo de cinco años frente al dólar, la era del “superpeso” podría haber llegado a un final abrupto.

Desde que inició la crisis bancaria el 9 de marzo, el peso se debilitó un 5.9 por ciento, el peor desempeño entre las 23 principales monedas de mercados emergentes que siguió Bloomberg durante ese período.

Comienza desmoronamiento del peso mexicano

El desmoronamiento del peso proviene de la agitación en la banca global que ha llevado la volatilidad implícita de la moneda a un mes a un 17.2 por ciento, la más alta en más de dos años y medio.

Eso socavó el atractivo de las altas tasas de interés de México, lo que se conoce como “carry trade” cuando inversionistas toman prestado en una moneda para invertir en otra.

Si bien el peso aún es atractivo con una tasa de interés clave del 11 por ciento, ya no es la única opción, ni la más obvia, en los mercados emergentes.

Monedas de Latinoamérica desplazan al “superpeso”

Las preocupaciones de que la inestabilidad financiera en las economías desarrolladas persista, ahora hacen que la rentabilidad ajustada al riesgo sea mejor en el real brasileño y el peso colombiano.

De acuerdo con Bloomberg, el peso ya perdió su corona como la moneda de mercado emergente con mejor desempeño este año, con su ganancia de 1.7 por ciento deslizándose detrás de la del peso de Chile, que se ha fortalecido un 3 por ciento.

“El nearshoring, la sólida perspectiva fiscal de México y el, todavía, buen carry justifican una visión constructiva sobre el MXN, pero descartamos nuestros largos y nos mantenemos neutrales, especialmente dados los temores de una recesión en Estados Unidos y el reciente aumento en la volatilidad global”, dijo Guilherme Lemos, administrador de cartera responsable del libro de América Latina en XP Asset Management.

No solo el aumento de la volatilidad afecta al peso mexicano. Tras las crisis de Silicon Valley Bank y Credit Suisse Group AG, los operadores ahora se preguntan cuánto tiempo más podrá extender el banco central de México su ciclo de ajuste.

La parte corta de la curva swap de México ahora muestra una tasa de política implícita de 11.14 por ciento en seis meses, frente al 11.55 por ciento de hace solo 30 días.

Definitivamente, que dejen de celebrar en Palacio Nacional, pues el peso mexicano ya es la peor moneda de mercados emergentes.

JZ