Después de estar ausente por tres años, y no saber mucho de su trabajo, la periodista Carmen Aristegui ha reaparecido en los titulares de los diarios mexicanos, esto gracias al presidente López Obrador, quien la ha mencionado en sus conferencias, aunque no como todos lo esperábamos.
Ya no queda duda de que AMLO obliga a los periodistas a decir abiertamente si están a favor o en contra de su Gobierno. A que tomen una posición. De lo contrario, se dedicará a “defenderse” de los “ataques”, eso sí, cuestionando de la peor manera el trabajo del periodista.
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Pero, ¿qué hizo Aristegui que hizo enfurecer a AMLO?
López Obrador se enojó porque el portal de la periodista (Aristegui Noticias) difundió un reportaje de Latinus y Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, sobre lujosas mansiones habitadas por su hijo José Ramón, olvidando por completo la persecución que sufrió la periodista, así como su defensa por la democracia, los derechos humanos y la libertad de expresión, para ubicarla dentro del “bloque conservador”, “el hampa del periodismo” que se opone a su Gobierno.
Una completa hipocresía que se ha vivido en los últimos días. Pues mientras López asegura no calumniar a nadie, sus fervientes seguidores comenzaron una instantánea campaña de odio contra Aristegui en redes sociales, con todo tipo de insultos incluidos. Campañas violentas que, por cierto, López Obrador jamás condena, ni condenará.
Campañas, en las que cuando él era opositor, formaba parte. Él y sus aliados al movimiento, que ahora forman parte de su gobierno. Ellos que tanto defendieron a la periodista de los gobiernos anteriores, ahora CALLAN COMO MOMIAS.
Y para dar prueba de ello, SIEMPRE HAY UN TUIT:
