La empresa Hidrosina, una de las más grandes del país, fue vinculada por supuestas irregularidades acerca de las donaciones de combustible que Pemex entregaba a diversas dependencias gubernamentales.
En 2015 la Dirección Corporativa de Operaciones de Pemex logró detectar que por lo menos 9 gasolineras distribuían combustible que desde un inicio tendría que haber sido llevada a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), para el Gobierno del Estado de México, otros gobiernos y demás dependencias.
Cuatro de estas estaciones pertenecían a Grupo Hidrosina Plus, institución que cuenta con empresarios y políticos entre sus principales socios. El resto pertenecen a Grupo Tecpex, mismos que pertenecieron a Hidrosina previo a la investigación que realizó Pemex en 2015 y las cuales volvieron a formar parte de la empresa petrolera.
