Ante los señalamientos de la oposición que acusan a Morena de recurrir a “triquiñuelas” y “chicanadas” para no aprobar en su totalidad el “Plan B” de la Reforma Electoral, Mónica Fernández, presidenta de la Comisión de Gobernación, anunció que se podría convocar para el próximo mares 21 a sesión para dictaminar y aprobar estos cambios a las leyes electorales.
Fernández Balboa y Ricardo Monreal, coordinador de los senadores de Morena, negaron que su bancada pretendiera concretar una “chicanada” o emplear una táctica dilatoria para reducir el tiempo que tendrá la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para resolver las impugnaciones, como acusó la oposición.
“No hay ninguna, nosotros no estamos acostumbrados a hacer eso, nunca lo hemos hecho, nunca lo haremos, eso se hacía en el pasado, ahora somos muy transparentes y muy claros”, aseguró Monreal.
Recordaron que lo que va a analizarse no es el “Plan B”, sino solamente una modificación que hizo la Cámara de Diputados y que las comisiones del Senado tendrán que aceptar o no al artículo 12 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, que elimina la llamada “cláusula de la vida eterna” para partido pequeños.
“La realidad es que no estamos discutiendo el “Plan B”, no es ninguna táctica dilatoria, solamente vamos a analizar, debatir y dictaminar en el sentido que vaya a ser, ya sea a favor o el desechar la modificación que hizo la Cámara de Diputados”, insistió Mónica Fernández.
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Reiteraron que no se está analizando el “Plan B”, porque “eso ya se analizó, ya se discutió y ya fue votado en el periodo pasado”. Ahorita, mencionó, es única y exclusivamente definir si se va a aceptar o no la modificación que hizo la Cámara de Diputados y nada más”.
“Solamente vamos a dictaminar si aceptamos o no la modificación que hicieron los diputados al artículo 12 de la ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (Legipe), nada más. No estamos analizando el ‘Plan B’, eso ya se analizó y ya fue votado”, dijeron.
Legisladores de oposición aseguraron que esta demora para iniciar los trabajos de dictaminación corresponden a una estrategia política para obstaculizar las impugnaciones ante la Corte.
“No podemos negarlo, está muy claro es una táctica dilatoria, es una chicanada política, parlamentaria para llevarse esta dictaminación hasta finales de abril, así pareciera y obviamente la promulgación para cerrar los espacios para la inconstitucionalidad”, acusó Manuel Añorve, senador del PRI.
Con información de La Crónica y Enfoque Noticias
MSA
