Este lunes, la Cámara de Senadores aprobó con 120 votos a favor y dos en contra el las leyes secundarias que regulan la reforma laboral de 2017, donde destaca la justicia laboral, la democracia sindical y los acuerdos colectivos.
Los partidos opositores presentaron diversas reservas, sobre todo en los temas de outsourcing, la desaparición del salario mínimo —con lo que se podría garantizar ingresos suficientes para los trabajadores— y que las trabajadoras del hogar tengan las mismas prestaciones que cualquier otro asalariado.
Por su parte, los legisladores de Morena argumentaron que con esta reforma laboral, se acaba el sindicalismo charro. Pero para el priista Carlos Aceves del Olmo, dirigente de la CTM, esta nueva legislación sólo obedece a lo intereses de Estados Unidos y Canadá, por el TMEC, y no tomó en cuenta los convenios 87 y 97 de la Organización Internacional del Trabajo.
Para la senadora del PAN, Alejandra Reynoso, es necesario que en los próximos cuatro años se desarrolle un nuevo sistema de justicia sindical, que termine con el rezago en la materia, pues en 2017 las Junta Local de Conciliación y Arbitraje tenía 422 mil 827 juicios, de los cuales solo había resuelto 98 mil.
