Todo parece indicar que se le acumulan los problemas al panista Enrique Vargas, quien es diputado federal por el blanquiazul y busca ser el candidato de la oposición al gobierno del Estado de México en 2023.
En esta ocasión, él mismo se puso el pie; pues es que además de las dudas sobre su generoso patrimonio inmobiliario, ya se echó en contra a varios empresarios por andar diciendo que los tiene en el bolsillo.
De acuerdo con Reforma, el precandidato del PAN al gobierno mexiquense anda presumiendo que cuenta con el apoyo —y el financiamiento— de grupos empresariales, sin ser cierto en lo más mínimo. La jugada, obviamente, busca crear la idea de que es inevitable que sea el abanderado de la alianza PAN-PRI-PRD, es decir, “Va por México”.
Empresarios se deslindan
La realidad dicta todo lo contrario, pues Vargas del Villar no cuenta con esos “patrocinadores” que tanto presume, que de hecho ya han salido a deslindarse de las versiones —surgidas del propio panista— de que le habrían ofrecido enormes recursos para su campaña.
Con tales acciones, da la impresión de que Enrique Vargas en lugar de consolidar su candidatura, se está cerrando la puerta del PRI y de algunos sectores de la iniciativa privada mexiquense.
Aunque parecía que tenía el camino allanado para ser el candidato de la oposición en el Estado de México, se le acumulan los problemas al panista Enrique Vargas.
JZ
