Parece que no todo los integrantes del gabinete del presidente Obrador son tan austeros como quisiera, y es que esta mañana se dio a conocer que el titular de la secretaría de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, no declaró un inmueble ubicado en la ciudad de Houston, Texas, que está a su nombre.
Con este “despiste”, ya van dos funcionarios que cometen el mismo error: la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y el ya mencionado Espriú, de quienes queda en duda si el presidente López Obrador hará valer su palabra cuando mencionó que quien no declarara todos su bienes, no tendría cabida en su equipo de trabajo.
Cabe resaltar que tanto el departamento de Espriú como el penthouse de Cordero no son para nada baratos. Un mexicano promedio requiere de ganar 108 mil 103 salarios mínimos al año o 2 mil 79 por mes, lo que significa 213 mil 472 pesos cada 30 días.
Para el “depa” de Espriú, se requiere básicamente la mitad pues el inmueble está valuado en 6.6 millones de pesos.
Pensando en la austeridad, ¿será que con este aumento al salario mínimo, los mortales podremos adquirir “casitas” en el extranjero?
