Ricardo Gallardo, quien renunció al PRD, estuvo preso por delincuencia organizada

El diputado federal, Ricardo Gallardo, es uno de los perredistas que renunció este martes al Partido Demócrata, para conformar un nuevo “grupo independiente”.

Según Gallardo, el motivo de su salida es porque no existe congruencia con la agenda de la izquierda, que ha sido el motor que mueve el partido. No obstante, tras este suceso sería importante recordar el pasado oscuro del ahora excoordinador del grupo parlamentario del PRD en San Lázaro.

Gallardo Cardona, a quien apodan “El Pollo” estuvo preso por supuestos vínculos (nunca confirmados) con la delincuencia organizada en los centros penitenciarios federales de Hermosillo, Sonora, Ocampo y Guanajuato. Aún estando en proceso penal, fue designado como candidato al Senado por la coalición “Por México al Frente”.

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De acuerdo con el Registro Público de la Propiedad y del Comercio, de 2010 a la fecha, Gallardo Cardona y su padre, Ricardo Gallardo Juárez,  pasaron de tener una empresa avícola endeudada con Bachoco a 30 propiedades que en conjunto valen poco más de 120 millones de pesos. Y fue así como de humildes polleros, se convirtieron en potentados y narcos estatales.

Los dos Gallardo comparten una historia política, pues Gallardo Juárez gobernó Soledad de Graciano Sánchez de 2009 a 2012 y después lo hizo su hijo, Gallardo Cardona; en 2016. No hay duda que el paso de los Gallardos por la política, ha sido de más prolífico para sus negocios.