Después de que las empresas IEnova y TransCanada todavía se encuentren en duda para trabajar en conjunto con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para la construcción del gasoducto Texas-Tuxpan, el presidente Andrés Manuel López Obrador indicó que en caso de no llegar a un acuerdo, el proceso legal será continuado pero con autoridades internacionales.
“Si no se llega a una cuerdo, se continúa con el proceso legal, porque se trata de contratos de 80 mil millones de dólares, porque implicaría pagar tarifas muy altas, ese gas se utilizaría para la generación de energía eléctrica y aumentaría los costos de las tarifas, no es cualquier cosa”, explicó.
Por su parte, el titular de la CFE, Manuel Bartlett, informó que en los últimos días ha sostenido varias reuniones con integrantes de la empresa TransCanada y con varios funcionarios de la Embajada de Canadá, pues de nuevo mostraron intenciones de renegociar los contratos.
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No obstante, el embajador canadiense, Pierre Alarie, aseguró que ha sido imposible dialogar con los representantes de la CFE y que el proceso legal fue iniciado por el propio Gobierno mexicano y no por Canadá, tal como lo había mencionado Bartlett.
