En la Sexta Sección de Lomas Verdes, Naucalpan, Estado de México, un creciente descontento se ha hecho evidente entre los vecinos, quienes cuestionan la gestión de su asociación condominal. La falta de transparencia y posibles irregularidades en el manejo de las cuotas de mantenimiento han generado inquietud y sospechas entre los residentes, que desde hace años buscan respuestas claras sobre el uso de sus contribuciones.
La preocupación se intensificó en 2022, cuando la asociación implementó un acuerdo de confidencialidad que sorprendió a muchos propietarios. Según testimonios, este acuerdo fue firmado por los miembros de la mesa directiva con el objetivo de evitar la divulgación de información interna, pero para los vecinos, esta medida representa una barrera para la rendición de cuentas. “Es frustrante que una organización que debe velar por nuestros intereses tome decisiones sin informarnos”, expresó un residente inconforme.
A esta falta de claridad se suma la sospecha de que la asociación podría estar involucrada en actividades que no benefician directamente a los residentes. En particular, los vecinos denuncian pagos elevados a ciertos proveedores sin que el gasto sea sometido al escrutinio de la asamblea, y sin que se demuestre un beneficio claro para la comunidad. “Nos preocupa que los recursos estén siendo destinados a fines ajenos al bienestar de la comunidad”, comentó otro propietario, quien señaló que las decisiones de la mesa directiva parecen ir en una dirección opuesta a los intereses del fraccionamiento.
En contraste, en la Ciudad de México, la Ley de Propiedad en Condominio garantiza la transparencia y la responsabilidad de las asociaciones de residentes, exigiendo que rindan cuentas y operen bajo vigilancia de un comité, además de contar con un registro ante la Procuraduría Social. Sin una ley similar en el Estado de México, los vecinos de Lomas Verdes se encuentran en una situación de vulnerabilidad, sin mecanismos efectivos para exigir la rendición de cuentas o sancionar a quienes incumplen con sus deberes.
A pesar de que en las asambleas se ha votado a favor de exigir más transparencia, los esfuerzos no han tenido el efecto esperado. “Aunque hemos solicitado rendición de cuentas, no vemos ningún avance. La mesa directiva firmó un acuerdo de confidencialidad que nos impide conocer información clave”, comentó un residente. Además, algunos miembros de la asociación han advertido que la seguridad podría verse comprometida si se intenta remover la actual administración, un argumento que ha generado temor entre los vecinos en medio de un conflicto con un residente que busca desmantelar las casetas de vigilancia.
De cara a este complejo escenario, las próximas elecciones para elegir a la mesa directiva, programadas para noviembre y diciembre, son vistas por los vecinos como una oportunidad para lograr un cambio en la gestión. “Este proceso electoral puede representar un punto de inflexión que permita alcanzar la transparencia que hemos buscado por tanto tiempo”, dijo un propietario, quien junto con otros espera que la nueva administración adopte prácticas más responsables y orientadas al beneficio de la comunidad.
Mientras tanto, los residentes de la Sexta Sección de Lomas Verdes continúan su lucha por una gestión transparente y responsable. Sin una ley que los respalde, su demanda de claridad y rendición de cuentas sigue siendo una meta difícil de alcanzar, pero confían en que un cambio en la mesa directiva podría traer mejoras significativas para la comunidad.