Javier Jimenez Espriú, próximo secretario de Comunicaciones y Transportes, confesó no tener los recursos para realizar “a detalle” el proyecto para la construcción de dos pistas en la base aérea de Santa Lucía. Sin embargo, dijo tener la “confianza”, de que al ser aceptada esta opción, se conseguiría el financiamiento para su desarrollo.
“Creemos que sí, son detalles muy complicados, pero hemos explorado esta situación y podemos decir que sí habría forma de financiar este proyecto”, aseguró, Espriú.
A pesar de no tener avances ni conocer el proyecto, Jiménez Espriú, aseguró que construir las dos pistas en Santa Lucía costaría alrededor de 70 millones de pesos, y no en los 385 mil millones que calculó el Colegio de Ingenieros Civiles de México en un dictamen publicado hace unos días.
Asimismo, respecto a la consulta pública que pretenden realizar a finales de octubre para definir el futuro del Nuevo Aeropuerto Internacional de México, descartó que ésta generaría incertidumbre como lo dijo JP Morgan. Sin embargo, recordemos que tampoco se ha definido el procedimiento que se utilizará para llevar a cabo dicha consulta.
Santa Lucía se encuentra en fase conceptual porque “no hemos tenido ni tenemos recursos para hacer el proyecto a detalle”, reconoció el futuro secretario de la SCT.
En contraste, el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México no sólo ya fue diseñado “a detalle”, sino que además, ya lleva 30 por ciento de avance en su construcción, según datos del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México.
Así, la necedad del próximo Gobierno se hace evidente, al anteponer un proyecto del que no se cuentan con estudios, ni fuentes de financiamiento a uno con 30 por ciento de avance. Sin duda, este cinismo sí genera incertidumbre.
Pese a todas las evidencias que apuntan a Texcoco, ¿en verdad la consulta popular será la que defina el futuro del NAIM?
