Además de una sociedad polarizada y un país sumergido en una terrible crisis de violencia e inseguridad, el presidente Andrés Manuel López Obrador heredará a la próxima administración federal las consecuencias de su fallido “rescate de la soberanía energética”.
Pese a que el mandatario tabasqueño a despilfarrado el dinero de todos los rescates para dar estabilidad a las finanzas de Petróleos Mexicanos (Pemex), la paraestatal sigue siendo la más endeudada del mundo; además arrastra problemas económicos, los cuales representarán un desafío financiero para el próximo gobierno Federal.
Cabe recordar que el pasado martes 13 de febrero, López Obrador firmó un decreto con el cual se le condonó a Pemex el pago de impuestos de los últimos cuatro meses, lo que equivaldría al menos a cerca de 86 mil 640 millones de pesos.
En ese sentido, le dio a la empresa petrolera un multimillonario apoyo fiscal extra de unos 6,400 millones de dólares (mdd).
Eso se suma a los más de 90 mil mdd, al tipo de cambio vigente, que Pemex habrá recibido en “apoyos” durante el sexenio de AMLO -entre créditos fiscales, rebajas a la tasa de un derecho clave e inyecciones de capital- usados mayormente para pagar deuda financiera, de unos 106 mil mdd.
De acuerdo con una fuente consultada por Forbes México, estos apoyos de Andrés Manuel servirá para reducir las deudas de Pemex con proveedores, de 17 mil 200 mdd al cierre de septiembre.
“Todo forma parte de una estrategia de transición ordenada y de un aterrizaje suave para la próxima administración que entra en octubre”, dijo la fuente de alto rango de Pemex, quien habló bajo condición de anonimato.
Y agregó: “Sin embargo, aún hay enormes desafíos no sólo por las enormes deudas -muchas de las cuales fueron heredadas- sino con todos los retos en su misma operación, producción, refinación. Por ahora se busca pagar las deudas fuertes de bonos de este año y parte de la de proveedores”.
Sheinbaum buscaría que Pemex fuera menos dependiente
La misma fuente opinó que con una futura administración de Claudia Sheinbaum se buscaría que Pemex fuera menos dependiente de los fondos del gobierno.
Además, agregó, perseguiría la promesa aún incumplida de López Obrador de alcanzar la “soberanía energética”, según la cual México dejaría de importar combustibles para hacerlos en casa.
Rescate fallido de Pemex
Según cálculos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) sobre los resultados financieros a septiembre, Pemex tenía que amortizar la mitad del saldo total de su deuda financiera en un plazo de cuatro años entre octubre del 2023 y septiembre del 2027, equivalente a 53 mil mdd.
La compañía enfrenta vencimientos de deuda, especialmente asociadas a bonos, por unos 35 mil mdd entre 2025 y 2030. Las amortizaciones de este año suman casi 11 mil mdd, que cubrirá con ayuda del gobierno.
“A pesar de todo lo que se le dio, las presiones de deuda para el 2024 y 2025 son muy fuertes. Pemex ha sido el fracaso fiscal del sexenio, un rescate que nunca lo fue”, opinó el instituto.
Jesús Carlos Carrillo, especialista del IMCO, comentó que pese a los apoyos, la deuda financiera en términos nominales bajó de 1.99 billones de pesos en 2018 a 1.86 billones a septiembre pasado.
Y es que para la empresa salir a los mercados no es una opción ahora por los altos costos tras rebajas de calificaciones crediticias, que la colocan en la categoría especulativa. La última vez que lo hizo, en enero del 2023, fue para colocar 2,000 mdd al 10.375%.
Su director general, Octavio Romero, sostiene que los mercados y las calificadoras “castigan” a la firma, que asegura mejoró en el último lustro su desempeño en producción de hidrocarburos, refinación y baja de la deuda financiera.
Dos fuentes, una vinculada al equipo de Sheinbaum y otra de Pemex, dijeron que aún no se ha realizado alguna reunión formal entre directivos de la petrolera y la candidata para planificar alguna estrategia de transición.
Sin embargo, “muchas cosas ya vienen con el sello del presidente AMLO y se hacen”, dijo la fuente de Pemex refiriéndose al mandatario.
Y agregó: “La idea es dejar un Pemex mejor de como se recibió. Pero no se han resuelto muchos problemas y los desafíos son fuertes”, en referencia al recorte de presupuesto de inversión del 36% para la empresa este año.
Con información de Reuters y Forbes México
MSA
