Este martes, se dio a conocer que las placas del Jetta blanco, modelo 2013, que regularmente transporta al presidente Andrés Manuel López Obrador en realidad son de una camioneta Ford.
Con base en información del Registro Público Vehicular (Repuve), las placas 625-YPH del automóvil ‘presidencial’ corresponden a una camioneta de carga Ford 7-350.
Asimismo, el Repuve señala que dicho carro se registró en 2005 en Oaxaca y se emplaco en octubre de 2019 en la Ciudad de México.
Sin embargo, existen antecedentes, que la misma “Cuarta Transformación” difundió, donde se detalló que tales placas corresponden a un Jetta 2013.
Para aclarar esta confusión, la Secretaría de Movilidad (Semovi) de la Ciudad de México afirmó que dicho auto con placas con 625-YPH mantiene su registro ante esa dependencia, en consecuencia, solicitará que Repuve rectifique.
“El vehículo Jetta blanco que porta placas 625-YPH fue registrado ante la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México el 30 de noviembre de 2012 con el número de serie 3VWBV49M6DM028117, a nombre de Rosario Alejandro Esquer Verdugo.
“La Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México desconoce las razones por las cuales, ante el Registro Público Vehicular (Repuve, institución encargada de la identificación vehicular a nivel nacional), se registró un vehículo distinto por parte de la Secretaría de Finanzas del Estado de Oaxaca en marzo de 2019. Se hará la solicitud al Repuve para realizar la rectificación del registro”, indicó Semovi en una nota informativa.
Asimismo, la Semovi acotó que el Jetta que moviliza a López Obrador cuenta con las tenencias al corriente y su tarjeta de circulación vigente.
¿A qué se habrá debido esta supuesta confusión y cuál fue el destino de la camioneta Ford?
Con información de Contrapeso Ciudadano y Reforma
