Para evitar que la propagación del coronavirus se extienda hasta los reclusorios, colectivos y organizaciones defensoras de derechos humanos pidieron a las autoridades liberar a personas detenidas por delitos no violentos o graves y no escatimar en las medidas cautelares.
El Centro de Apoyo Integral para Familiares de Personas Privadas de la Libertad, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro, Colectiva Hermanas en la Sombra, EQUIS Justicia para las Mujeres, entre otras, también solicitaron la suspensión de visitas de familiares en centros penitenciarios.
“Actualmente en nuestro país hay 202 mil 337 personas en reclusorios y el 37% de las prisiones presentan problemas de hacinamiento, y a nivel nacional, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 46% de las personas privadas de la libertad comparten celda con más de cinco personas y en algunos lugares la cifra es mucho mayor”, explicaron los colectivos ante medios de comunicación.
Además, señalaron que el 11.5 por ciento de dichas personas tienen más de 50 años, y cuentan con condiciones médicas que se podrían agravar si llegan a contraer el Covid-19; aunado a que 38.5 por ciento de quienes se encuentran en las cárceles mexicanas no han recibido una condena.
Ante esta situación, las organizaciones le exigieron al gobierno federal y al estatal que implementen medidas especiales en las prisiones para evitar contagios masivos, y también recomendaron adoptar “una política de no detención por delitos no violentos como el caso de transporte y posesión de sustancias ilícitas o infracciones administrativas”.
Asunto serio que no deben soslayar las autoridades penitenciarias de este país, porque si el coronavirus se llega a propagar en los centros de reclusión las repercusiones serían fatales e inmensas.
Con información de El Sol de México
