El presidente Andrés Manuel López Obrador sugirió a la oposición no gastar dinero “a lo tonto” en guerras sucias o campañas negras para ganar elecciones, al asegurar que ello “ya no funciona”.
Durante su conferencia matutina de este martes, el mandatario tabasqueño aseguró que el pueblo de México es muy consciente, avivado y no es susceptible de manipulación.
En ese sentido, presumió que uno de los logros más grandes de su administración ha sido el cambiar la mentalidad de la población, “cuando cambia la mentalidad de un pueblo, cambia todo. Es de los pueblos más conscientes y politizados del mundo”.
Sobre la información que el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, presuntamente contrató los servicios de Antonio Solá, autor de la campaña “López Obrador es un peligro para México”, López Obrador confió en el pueblo que ya está muy despierto para no dejarse llevar por esas campañas.
“No lo han entendido algunos que piensan que, con las mismas prácticas de siempre, que las campañas negras, las guerras sucias, la manipulación, con eso van a imponerse; ya no, no se puede poner vino nuevo en botellas viejas, ya es otra realidad”, apuntó.
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Ante ello valdría la pena reflexionar lo siguiente:
1.- AMLO presume que con su 4T cambió la forma de pensar de los mexicanos, sin embargo, olvidó omitir que durante sus campañas electorales utilizó discursos de odio para dividir a la sociedad.
Incluso, todas las mañanas continúa agravando la polarización entre los mexicanos al utilizar descalificaciones como “fifís”, “neoliberales”, “conservadores”, entre otros para arremeter contra quien piense diferente a él y no se alineen a su gobierno corrupto.
2.- Obrador dice que las guerras sucias o campañas negras “no sirves” ¿Entonces por qué insiste en ignorar la veda electoral para hablar mal de la oposición y, al mismo tiempo, utilizar todo los instrumentos del Estado para perseguir a sus opositores en pleno proceso electoral?
Por último, no hay que olvidar que AMLO manipula la información utilizando su frase “otros datos” para controlar y manejar a los mexicanos a su voluntad.
Con información de La Razón y Contralínea
MSA
