El presidente Andrés Manuel López Obrador ha minimizado la inflación al decir que este problema ocurre en todo el mundo y que factores externos, como la pandemia del coronavirus y la guerra entre Ucrania y Rusia, han provocado que se eleven los precios de distintos productos.
Sin embargo, esto es sólo una excusa que el mandatario tabasqueño ha usado para desviar la atención de un factor interno que ha provocado mayores presiones inflacionarias: la intervención del crimen organizado en el sector económico de México.
Este tema lo aborda Enrique Campos en su columna “El crimen organizado detrás de la inflación”, en donde expone cómo las bandas criminales tienen presencia en la vida económica de muchas regiones y sectores.
“Nos distraemos muy fácil con los malabares matutinos, pero tiene alcance nacional la presencia de la extorsión a los comercios, de todo tamaño, que están obligados a pagar derecho de piso para poder trabajar”, señaló.
Recordó como comerciantes son extorsionados y que ello ha provocado que productores eleven los precios de sus productos, lo cual afecta a los consumidores.
“La inflación provocada por los actos del crimen organizado es solo un enfoque para acercarse a uno de los grandes problemas de México, que tiene muchos rasgos de ser un Estado fallido”, subrayó.
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Con información de El Economista
MSA
