Un conglomerado de al menos 150 personas, identificados como alumnos de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, se dieron cita en las inmediaciones de la caseta de cobro ubicada en Tlalpan, al inicio de la autopista México-Cuernavaca.
Los estudiantes arribaron al lugar en cuatro autobuses, se instalaron y exigieron que el paso fuera libre para los automovilistas, a quienes aprovecharon para pedir una cooperación voluntaria. .
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Dentro de sus demandas, pedían eliminar el examen de ingreso a la Normal y solicitaron que la investigación para encontrar a los 43 desaparecidos no cese.
Debido a las protestas, trabajadores de las casetas se dispusieron a cerrar las ventanillas y puertas de las casetas, además, llamaron a las autoridades para prevenir cualquier tiempo de agresión.
Al lugar llegaron Policías federales y elemento de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, con el único objetivo de proteger a automovilistas, manifestantes y trabajadores.