Luego de que el pasado viernes fue asesinado José Remedios Aguirre, candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia” a la alcaldía de Apaseo el Alto, Guanajuato, senadores del PT-Morena exigieron al gobierno federal una estrategia para frenar la violencia política.
“Ante los alarmantes niveles de violencia política que se han alcanzado en el presente proceso electoral, el Grupo Parlamentario del PT-Morena reitera la exigencia al Gobierno Federal de una estrategia que disminuya efectivamente la violencia y permita una transición del poder civilizada y armónica” indicó el grupo parlamentario en un comunicado.
Sin embargo, los legisladores de Morena, deberían pedir cuentas a su líder nacional Yeidckol Polevnsky, quien desdeñó las invitaciones a las mesas de trabajo realizadas por la la Secretaría de Gobernación desde febrero pasado.
En su momento la dirigente del partido rechazó la invitación del secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete, y pidió que no se hicieran las mesas de entre Segob y los partidos políticos debido a que –según sus palabras– en el país había temas más prioritarios que la seguridad de los candidatos.
Ahora con los hechos lamentables del asesinato de José Remedios Aguirre, los legisladores acusan de omisión e incapacidad del gobierno federal.
“Hoy, a 48 días de la elección y a 93 de muertos políticos en el proceso electoral, la respuesta del Gobierno ha sido la omisión y declaraciones intrascendentes y campañeras”, indicó el senador Luis Humberto Fernández.
¿Y qué hay de la omisión de Morena, que se negó a acudir a las mesas de trabajo sobre la seguridad de los candidatos?
La hipocresía de Morena sale a relucir, ya que ellos se negaron a participar en una serie de mesas de trabajo, pero ahora que desafortunadamente uno de sus candidatos fue asesinado, piden una estrategia.
¿Por qué no se integran a las mesas de trabajo propuestas por el secretario Navarrete Prida? ¿Por qué alzar la voz y exigir un trato diferencial ahora que un candidato suyo ha sido asesinado?
