De acuerdo a cifras presentadas por el mismo gobierno federal, al menos 26 alcaldías con altos índices delictivos se localizan en entidades que ya son o serán gobernadas en los próximos meses por un mandatario de Morena.
Entre ellas destacan Baja California, Colima, Sonora, Guerrero, Zacatecas, Michoacán, Sinaloa, Ciudad de México, Morelos y Puebla. La mayoría de esas alcaldías se sitúan en los siete estados que estrenaran próximamente un gobernador morenista.
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Un ejemplo es Sonora, entidad que próximamente será gobernada por el ex secretario de Seguridad, Alfonso Durazo. En la entidad se ubican seis municipios con severos problemas de violencia. Entre ellas destaca el caso de Cajeme, donde se han cometido 225 homicidios dolosos en lo que va del año.
En Baja California, donde actualmente gobierna Morena con Jaime Bonilla, y lo seguirá haciendo con Marina del Pilar Ávila; registra 749 asesinatos. En Ensenada suman 158 muertes a manos del crimen organizado; en Tecate, 124 y en Mexicali, 92.
Otra de las entidades violentas es Michoacán. En esta demarcación, que será gobernada por el morenista, Alfredo Ramírez Bedolla, destacan los casos de Zamora y Morelia donde han sido asesinadas 148 y 138 personas, respectivamente.
Zacatecas registra tres alcaldías entre los 50 municipios más violentos y el caso más llamativo se da en Fresnillo, donde al menos 190 personas han sido asesinadas en lo que va del año.
En cuanto a la Ciudad de México se ponen como focos rojos a las alcaldías de Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza, pues registran 94, 66 y 48 homicidios dolosos en lo que va de 2021.
El resto de municipios violentos ubicados en demarcaciones que serán gobernadas por Morena son Acapulco e Iguala, en Guerrero; Manzanillo en Colima, la ciudad de Puebla; Cuernavaca y Culiacán.
Con información de Milenio
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