Morena alaba a Mao Zedong, el comunista genocida que asesinó a 70 millones de chinos

Este modelo de gobierno criminal es el que quiere implementar el dictador de Palacio Nacional para nuestro país

Morena alaba a Mao Zedong, el comunista genocida que asesinó a 70 millones de chinos
Foto: Twitter / @CartonCalderon

En redes sociales circula una fotografía en la cual se muestra un pasillo las oficinas de los diputados federales de Morena en donde están colgados varios cuadros de diversas figuras comunistas como Fidel Casto, Ernesto “El Che” Guevara y Karl Marx.

Lo que llama la atención es que también está colgado un retrato del dictador chino Mao Zedong, señalado por ser el mayor genocida de la historia de la Humanidad; pues durante la llamada “Revolución Cultural” fueron asesinadas 70 millones de personas.

Las tres puergas de“El Gran Timonel

Mao Zedong nació en 1893, en una familia campesina adinerada. Nunca trabajó en el campo ni en una fábrica. Estudió en la Universidad y luego estuvo en la fundación del partido comunista. Pronto aprendió cómo funcionaba una organización marxista-leninista teniendo como ejemplo los sucesos de Rusia entre 1917 y 1924.

Las guerras civiles y la segunda guerra mundial le permitieron convertirse en dictador en 1949. A partir de ahí hizo tres grandes purgas: 

La primera purga fue entre 1950 y 1953 con una directiva para eliminar contrarrevolucionarios. Se atacó a todos los que fueran un peligro político o económico para la dictadura, como hizo Lenin: campesinos propietarios y nacionalistas chinos, los simpatizantes del Kuomintang. Se calcula que hubo un millón de muertos.

La segunda fue entre 1955 y 1957 para «limpiar» el partido y la administración. Fue el llamado “Movimiento Sufán” donde hubo 700 mil muertos. Con estas dos purgas liquidó al otro gran partido político chino, y eliminó a los contestatarios comunistas.

Como todo gran dictador, al estilo de Fidel Castro, por ejemplo, adaptó la ideología marxista-leninista a China con sus propias ideas. Eso fue el maoísmo, la forma de llegar a la “sociedad perfecta” adaptada a China. Solo Mao Zedong había visto el camino y guiaba a su pueblo a pesar de los enemigos. Por eso era llamado el “Gran Timonel”. 

Mao implantó reformas que trajeron terribles consecuencias para la población

El 1 de octubre de 1949 Mao instauró la República Popular China, fundada en un duro marxismo leninismo y en distintas campañas de ideologización que reforzaron su poder y sirvieron de propaganda divulgadora del régimen comunista.

Carecía de carisma personal y del don de la oratoria, pero tenía una habilidad para manipular a la gente y tornar cada situación en su propio beneficio.

Era despiadado, egoísta, envidioso, sanguinario y vil con todo el mundo. El único que le importaba era él mismo, pero así se mostró a toda una generación.

El presidente Mao ama al pueblo. Él es nuestro guía para construir una nueva China. ¡Hurra, él nos lleva hacia adelante!”, así cantaban en el himno de la República Popular de China durante la “Revolución Cultural”.

Mao, quien estuvo fuertemente influenciado por los grandes líderes comunistas soviéticos, implantó una serie de reformas urbanas y agrarias a través del primer plan quinquenal de China (1953-57), el “Gran Salto Adelante” (1958-62) y la “Revolución Cultural” (1966-76) que tuvieron terribles consecuencias para el pueblo y la economía de China.

Con su “Gran Salto Adelante” pretendió transformar la tradicional economía agraria del país con una serie de medidas económicas, sociales y políticas. Quería que China superase al resto de países además de ser ejemplo de Estado comunista consiguiendo relegar a la misma Unión Soviética en producción mediante una rápida industrialización.

El resultado fue la peor hambruna de la historia al expropiar los alimentos del pueblo para enviarlos a la URSS a cambio de fábricas y armas. Se estima que alrededor de 20 millones de personas murieron por la Gran Hambruna china.

Ambicioso y paranoico a partes iguales, elaboró el Libro Rojo con el que respaldaría sus ideas. Mao replantearía su estrategia, reconociendo que “las propiedades y riquezas pueden ser confiscadas, pero no las ideas”, declarando la batalla cultural.

Enemigos de “El camarada Mao” eran torturados y decapitados

En este contexto tiene lugar la tercera purga camuflada bajo el nombre de “Gran Revolución Cultural” proletaria (1966-1976). Su objetivo fue eliminar a quienes consideraba sus enemigos. A pesar de que los números son inciertos, se estima que cerca de un millón y medio de personas perdieron la vida y otros 20 millones fueron enviados a campos de reeducación.

Para alcanzar los objetivos, el mandatario chino debía reclutar un ejército que solo respondiese ante a él; por tanto, debía ser externo a su propio partido. Los elegidos fueron los estudiantes, que ya eran ajenos a las tradiciones por haberse formado según los preceptos del maoísmo.

Estos jóvenes pasarían a ser los Guardias Rojos. Viene a la mente la imagen de una multitud que vitorea y alaba al Gran Timonel, niños que sujetan con orgullo el librito rojo. Jóvenes dispuestos a hacer cualquier cosa por el “Camarada Mao”. Las víctimas de la “Revolución Culturalfueron detenidos y reeducados para jurar fidelidad al partido.

En caso contrario fueron torturados, golpeados hasta la muerte, enterrados vivos, lapidados o decapitados.

Con la muerte del líder comunista el 9 de septiembre de 1976 terminaba una de las etapas más aterradoras y sangrientas que vivió el país asiático.

Este es el destino que quiera el dictador bananero de Palacio Nacional para México; un país en donde sólo haya focas aplaudidoras que solapen y apoyen todas sus errores y ocurrencias; y quienes lo critican sean silenciados.

Con información de larazon.es y eldebate.com

MSA