Tras la aprobación de la reforma judicial en el Senado de la República, la agencia Moody’s alertó que la elección de jueces, magistrados y ministros por la vía del voto popular, deteriorarán los controles y equilibrios, además, podría socavar la fortaleza económica y fiscal de México.
En un análisis distribuido a medios, Moody’s recordó que el pasado 11 de septiembre, la Cámara Alta mexicana aprobó formalmente la reforma constitucional “transformadora y controvertida que deteriorará la independencia del Poder Judicial del país”.
Además, reiteró que la nueva ley “podría politizar los dictámenes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), además de comprometer la independencia del sistema”.
“Podría politizar los dictámenes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), además de comprometer la independencia del sistema”, indicó la agencia.
De igual forma, indicó que la reforma judicial “deteriorará los controles y equilibrios y podría socavar la fortaleza económica y fiscal de México”.
Añadió que “a medida que el Poder Judicial se realinea cada vez más con los poderes ejecutivo y legislativo, su papel en el control y equilibrio de las otras ramas de poder se deteriorará“.
Moody’s alertó que la falta de claridad jurídica está provocando inestabilidad financiera a corto plazo. De persistir esta desconfianza, podría incrementar los diferencias gubernamentales, disminuir la inversión privada y afectar la capacidad para manejar la deuda, así como las perspectivas.
“Los cambios en el sistema judicial y regulatorio de México generarían más incertidumbre en sus proyectos de infraestructura”, agregó.
- Te recomendamos leer: Ebrard rechaza impactos negativos de reforma judicial en inversiones extranjeras en México
Reforma judicial aumentará incertidumbre: Moody’s
Asimismo, resaltó que la eliminación de organismos reguladores y autónomos es una propuesta que se considera después de la reforma al Poder Judicial, “aumentaría la incertidumbre en torno a las normas y procedimientos, y haría que el sector de infraestructura de México sea menos atractivo para la inversión privada, a pesar de las sólidas perspectivas de demanda”.
Explicó que “cuanto mayor sea la percepción del riesgo, más alta será la rentabilidad de las inversiones que buscarán los inversionistas y más elevados serán los costos adicionales derivados del análisis legal y la diligencia debida“.
De igual manera, la agencia señaló que “la incertidumbre jurídica probablemente afectará más a los sectores corporativos de México que dependen de concesiones y grandes inversiones, como la minería y las telecomunicaciones”.
“Los cambios en el sistema judicial serían particularmente perjudiciales para las futuras inversiones en ‘nearshoring’ o fenómeno de relocalización de cadenas”, indicó.
Por lo que “si la incertidumbre sigue presionando el peso mexicano, esto también perjudicaría los indicadores crediticios de las empresas que calculan sus costos en dólares estadounidenses y generan ingresos en pesos, o de aquellas con baja diversificación fuera de México“.