De acuerdo con el libro “Sueños rotos: La trama oculta del modelaje, el futbol y la televisión”, de Javier Benech, la Miss Uruguay, Fatimih Dávila, fue víctima de una red de prostitución.
De acuerdo con la publicación, en el segundo capítulo “El precio de la fama”, el relacionista público, José Miguel Acosta, conocido como el “Negro”, tenía relación con con Leandro Santos, el cual mantenía nexos con la productora Ideas del Sur, propiedad de Marco Tinelli.
A su vez, Acosta, tenía una estrecha relación con Pablo Bentancur —representante de futbolistas uruguayos— que junto con Tinelli, fueron considerados las cabecillas de la organización “prostitución VIP”, que fue desintegrada en 2012.
Como las llamadas de Acosta eran intervenidas, en una ocasión Dávila le comentó lo siguiente: “Estuve hablando con Leandro (Santos) y me dijo que estaría bueno que entre en algo de eso para cotizarme, para hacerme más conocida, porque el tema de Miss Uruguay nadie lo valora”.
En consecuencia, Acosta le prometió que actuaría en dos programas uno en Uruguay y otro en Argentina. Pero para la jueza Graciela Gatti, la modelo fue víctima de prostitución porque se encontraba en una “situación de vulnerabilidad, prometiéndoles proyectos y propuestas laborales que nunca se concretarían”.
Cabe señalar, que el libro salió a la venta en 2012, pero hasta ahora toma relevancia lo sucedido con Fatimih Dávila.
