México se queda solo ante la crisis venezolana

La crisis en Venezuela es un tema que compete a la comunidad internacional, y así quedó manifestado cuando el  Grupo de Lima y el Grupo Internacional de Contacto decidieron desconocer el gobierno de Nicolás Maduro, para exigir  nuevas elecciones libres y con base en la Constitución.

A estas alturas México, Bolivia y la Comunidad del Caribe (Caricom) son los únicos, en el continente americano, que respaldan a Nicolás Maduro, acción que ha generado un descontento tanto nacional como internacional.

La postura de México, desde que el líder de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autoproclamó presidente interino —el pasado 23 de enero— es la de mantener el diálogo y la mediación; algo que respaldo Uruguay.

Pero todo cambiará el pasado 7 de febrero —en la convención que tanto México como Uruguay organizaron—, pues después de analizar la situación, los orientales cambiaron su decisión y firmaron la petición para que se convocarán elecciones en el país caribeño, con lo que terminaron por desconocer al mandatario bolivariano.

Hasta el momento, ni el presidente, Andrés Manuel López Obrador, y mucho menos su canciller, Marcelo Ebrard, han dado indicios de que México denunciará emergencia humanitaria y pedirá nuevos comicios.

“Determinar si hay elecciones o no, cómo se organizan y cuando se celebran los comicios. México no puede hacer eso”, mencionó el canciller.

México tiene el reloj en contra, mientras se siga apoyando en la Doctrina Estrada, para no intervenir en la eventualidad venezolana, la comunidad internacional comenzará a ejercer presión sobre la administración obradorista.

Es por eso que…”no hay nada de neutral en el posicionamiento de México porque, en la práctica, valida la reelección de Maduro”, expresó explicó el ex diplomático mexicano, Andrés Rozental.