#MásPoesía Antonio Plaza

El poeta y el fraile

 

En púlpito lujoso encaramado,

pobreza el fraile con fervor predica,

y las ventajas del ayuno explica,

diciendo que la gula es gran pecado.

 

El hambriento poeta desdichado

encomia en su zahúrda triste y chica,

el lujo, los placeres y la rica

mesa, que tiene gusto delicado.

 

¿Por qué el fraile que traga sin conciencia,

quiere que expire su rebaño de hambre?

¿Por qué el poeta encomia la opulencia,

 

cuando carece de camisa y fiambre?

Porque en el mundo, con diversos modos,

todos procuran engañar a todos.

 

Tomado de la antología de Juan Domingo Argüelles: Poesía mexicana. De la época prehispánica a nuestros días.