López está derribando el presente para crear un futuro inspirado en el pasado: Financial Times

El texto hace una crítica sobre las viejas y malas decisiones del presidente López Obrador

Juicio Político
Especial

El tiempo ha pasado para México, pero no para Andrés Manuel López Obrador, quien se ha quedado estancado, dormido, enclaustrado como el personaje de ficción “Rip Van Winkle” que se queda dormido durante 20 años y vuelve a despertar a un mundo enormemente cambiado.

“Viene del pasado y está atrapado en el pasado”, compara Enrique Krauze, historiador mexicano, al presidente López Obrador con dicho personaje, y se utiliza como referencia en el texto de Financial Times.  

El texto hace una crítica sobre las viejas y malas decisiones del presidente López Obrador, como lo es el de la ley eléctrica, el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas. Pues de esta última señala que se construye en “un momento en el que las empresas energéticas mundiales compiten por deshacerse de esos activos en medio de un exceso de oferta”.

“Está profundamente enamorado de las malas ideas”, dice Moisés Naím, miembro del Carnegie Endowment for International Peace.

“Su aplastante victoria fue un triunfo para un político obstinado de provincias con un estilo campechano, de hombre del pueblo, que prometía defender a los mexicanos comunes porque él era uno de ellos”, enfatiza en uno de los párrafos.

Sin embargo, esta obsesión por ayudar a una parte, reduce la probabilidad de que sus propuestas tengan un final feliz porque impide el el “tercio rico” de este país participe y todo quedé a medias o estancado.

Lo que sorprende es, pese al mal manejo de su gobierno, López sigue manteniendo ese “apoyo” de la gente, pues justifican que “no puede cambiar el país de la noche a la mañana” y siguen con la esperanza de que llegará ese cambio que tanto ha prometido.

Eso pese a que no ha logrado bajar la violencia, mejorar la economía, acabar con la corrupción, no apoya a las mujeres y sí a violadores, y una larga lista de fracasos.

Con información de Financial Times

AIS