Un día después de que el Presidente de México presentó su iniciativa para reconocer a los pueblos indígenas y afromexicanos, 64 autoridades de diferentes comunidades de este sector anunciaron su respaldo a la reforma que reconoce sus derechos en la Constitución, al tiempo de hacer un llamado a Diputados y Senadores para su aprobación.
En una ceremonia tradicional, autoridades comunitarias y comunales llevaron a cabo un ritual en absoluto respaldo a la iniciativa con Proyecto de Decreto por el que se Reforma, Adiciona y Deroga el Artículo 2o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en Materia de Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanos, y con la intención de que vea la luz en el Congreso de la Unión.
“El Congreso de la Unión representan el anhelo y la esperanza por la cual hemos luchado los mexicanos para lograr la paz, la justicia y la democracia en nuestro país”, expresó Guillermina Maya Rendón, vocera del Consejo Hueyapan de Morelos.
La representante de esta comunidad señaló que esta Reforma Indígena representa un acto de elemental justicia social y resarcimiento de una deuda histórica. “Esta reforma es un paso necesario para hacer realidad un país pluricultural, justo y democrático en el que México sea realmente la casa de todas y de todos”, manifestó.
Maya Rendón agradeció al Ejecutivo federal por cumplir con su compromiso con los pueblos indígenas y afromexicanos y subrayó que el corazón de la iniciativa es el reconocimiento de este sector y con ello se reconoce la capacidad que tienen para tomar las riendas de su destino y sus propias decisiones.
Crisóforo Valenzuela Ahumada, secretario de la comunidad Rahum del pueblo Jaqui, de Sonora, enfatizó que la Reforma Indígena les permitirá ser sujetos titulares de un conjunto de derechos y obligaciones y por fin ejercerán su libre determinación y autonomía, así como consolidar su forma de gobierno y organización.
Mención especial merece la protección de su patrimonio cultural, la propiedad intelectual colectiva, la construcción de modelos educativos, así como la protección a la salud y a la medicina tradicional, resaltó.
“Se trata una reforma integral que considera los derechos fundamentales en otros pueblos, que retoma el espíritu de los acuerdos de San Andrés sobre derechos y cultura indígena, y que hace viable el ejercicio de nuestros derechos inalienables en todos los ámbitos y niveles de gobierno”, expresó.
Los representantes de los pueblos indígenas y afromexicanos hicieron un llamado a Diputados y Senadores para estar a la altura de los cambios trascendentales que requiere el país. “Los exhortamos a finalizar y probar con alto sentido de responsabilidad su compromiso con la iniciativa de Reforma sobre los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos que tienen en sus manos”, reiteró Crisóforo Valenzuela.
