La Secretaría de la Defensa Nacional no se esperó a que se apruebe la reforma a la Constitución que propone el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues en los hechos ya controla a la Guardia Nacional.
Todos los mandos de la corporación creada al inicio del sexenio de López Obrador pertenecen al Ejército y reciben órdenes directas de los altos mandos militares, a pesar de que, de acuerdo con el actual marco jurídico, deberían estar supeditados al control de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
En octubre del año pasado, la mayor del Ejército, Adriana Herrera, presentó un amparo en contra de decisiones tomadas por mandos de la Sedena que al mismo tiempo ocupan cargos directivos dentro de la Guardia Nacional, amparo que fue admitido y que actualmente está en revisión.
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En su demanda, admitida bajo la causa 694/2020, Adriana Herrera señala que altos mandos del Ejército que no se han separado de la estructura de la Sedena son quienes toman todas las decisiones de relevancia dentro de la Guardia Nacional.
Precisa que a la cabeza de esos mandos está el general Brigadier Inocente Prado López, quien tiene el cargo de titular de la Jefatura General de Coordinación Policial de la Guardia Nacional, pero al mismo tiempo es comandante de la Policía Militar de la Sedena. Jerárquicamente, Prado López solo está abajo del general Luis Rodríguez Bucio, comisiario general de la Guardia Nacional.
Y otro a la lista…
Otro mando que opera con doble cachucha es el general de brigada Carlos Corral, quien ocupa el cargo de comisario titular de la Subjefatura de Planeación Administrativa y Logística de la Guardia Nacional, pero a la vez es el jefe del Estado Mayor del Cuerpo de la Policía Militar en la Sedena.
El motivo del amparo solicitado por la mayor Herrera es que estos mandos le ordenaron separarse del cargo de directora de Vinculación Ciudadana de la Guardia Nacional y dirigirse a Reynosa en calidad de fiscal militar.
Y aunque ella está comisionada a la Guardia Nacional, sus superiores le dieron la orden en calidad de mandos de la Sedena, cuando de acuerdo con la Constitución, la corporación policiaca tiene un carácter civil y está supeditada a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Qué dijo Emeequis…
Recientemente, la revista digital emequis publicó un reportaje en el que menciona que la Sedena ha estado reclutando nuevos integrantes de la Guardia Nacional con engaños, pues convocan a los jóvenes a darse de alta en el Ejército y una vez ingresando los mandan a la Guardia Nacional.
Son muchas las voces que han sostenido que esta corporación supuestamente civil no es otra cosa que un brazo del Ejército, en clara violación a lo que establece en estos momentos la Constitución.
El pasado 25 de agosto fue publicado en el Diario Oficial de la Federación un acuerdo por el que se asigna a la Guardia Nacional la función de Autoridad de Supervisión de Medidas Cautelares y de la Suspensión Condicional del Proceso.
Lo relevante del asunto es que dicho acuerdo, suscrito por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana no está firmado por quien entonces era su titular, Alfonso Durazo, sino por el general Luis Rodríguez Bucio, comisario de la Guardia Nacional. Como para dejar claro quién manda en la Guardia Nacional.
