Esta es la historia de la “Falsa Mataviejitas”, una mujer que lleva 19 años esperando justicia, ya que como a miles en el país el Poder Judicial le quedó a deber.
Araceli Vázquez García quedó ligada con el mote de “La Mataviejitas” el 1 de abril de 2004. Por aquellos días, a la mujer de 1.56 centímetros de altura, 39 años, tez morena y ojos pequeños le cambió la vida para siempre.
Las autoridades y los medios de comunicación la relacionaron con una ola de homicidios de adultas mayores —hecho que tuvo en vilo al entonces Distrito Federal.
De acuerdo con la extinta Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, Vázquez dejó su huella en el vaso en una escena del crimen y la familia de la víctima, Gloria Enedina Rizo Ramírez, de 81 años, reconoció joyas en posesión de la inculpada.
Sin embargo, esa versión después se cayó
La historia de la “Falsa Mataviejitas”: Lleva 19 años esperando justicia
Los registros visuales de estos acontecimientos forman parte del documental “La Dama del Silencio, el caso Mataviejitas”, que produjo Mezcla y se encuentra en la plataforma de streaming Netflix.
A inicios de la década del 2000, la Procuraduría local enfrentó el mayor reto de su historia: detener a la persona que con inusual crueldad asesinó de manera serial a mujeres de entre 70 y 90 años en sus propias casas.
Al menos a 20 ancianas las estrangularon de 1998 a inicios de 2004, y la presión mediática y preocupación de los capitalinos por sus “abuelas” aumentó paulatinamente.
Vázquez aceptó desde el primer día que ella cometió varios robos, pero también negó ser la asesina serial que las autoridades capitalinas estaban buscando.
Juana Barraza, la verdadera “Mataviejitas”
30 asesinatos después de su detención —en un lapso de 1 año y 10 meses— le dieron la razón. Juana Barraza, de entonces 48 años, fue capturada in fraganti el 25 de enero de 2006, cuando acababa de estrangular a Ana María de los Reyes Alfaro, de 82 años, en su domicilio de la colonia Moctezuma. Desde esa fecha, los asesinatos contra adultas mayores cesaron.
Barraza recibió una sentencia por 16 homicidios con el mismo modus operandi: uno de ellos fue precisamente el de Gloria Enedina (que ocurrió en octubre del 2003), al cual Vázquez fue ligada cuando la presentaron ante los medios.
Aquella huella que encontraron en el vaso, la cual el subprocurador Renato Sales dijo que pertenecía a Vázquez, resultó ser de Barraza, por eso nunca le pudieron cargar ese crimen. Pero sí otro por el que paga una condena de 23 años 9 meses: el de Margarita Aceves Quezada, ocurrido el 5 de enero de 2004.
Para que conozcan esta historias —que exhibe las falencias de la procuración de justicia en México— a continuación les presentamos el trabajo de El País que cuenta la historia de la “Falsa Mataviejitas”, una mujer que lleva 19 años esperando justicia.
