Como seguramente sabe, maestros afiliados a la CNTE detuvieron, humillaron, exhibieron y raparon a profesores que sí dieron clases, que sí cumplieron con su trabajo y que sí respetaron la ley educativa.
El acto –grosero y fascista por donde se mire–, es la señal de que el magisterio disidente ya tocó fondo.
Para el Maestro Francisco Landero –presidente del consejo consultivo de SUMA por la Educación–, la CNTE llegó al límite y los actos del martes deben ser los últimos.
El agravio, advirtió el experto– no debe continuar y alguien debe ponerles un alto.
En entrevista para La Otra Opinión, Landero advirtió que la CNTE ha ido de los daños materiales a los ilícitos, a la corrupción y ahora a lesionar la dignidad y el espíritu de las personas.
Por ello, en vista de que el agravante es mayor, Landero llamó a sancionar a estos maestros que carecen de educación, que parecen desesperados porque perderán sus plazas y que no se han sometido a la evaluación que marca la ley.
En pocas palabras, Landero urgió a desaparecer la CNTE porque –en los hechos– sólo busca mantener sus privilegios a través de métodos violentos que involucran daños a la propiedad privada y contra la dignidad de sus afiliados.
A su vez, el Doctor Adolfo Laborde –internacionalista del Tec de Monterrey–, apuntó que la CNTE parece seguir los pasos de los ejércitos maoístas de la Revolución Cultural china, de los años más rancios del comunismo cubano y de regímenes autoritarios como los de Vietnam o Corea del Norte.
Por eso, en opinión de los analistas, es insostenible que persistan grupos mafiosos y criminales como la CNTE.
