Con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia un gran sector de la sociedad creyó que la distribución de la riqueza sería una prioridad en su gobierno, pues como él ha dicho “no puede haber gobierno rico con pueblo pobre”.
Sin embargo, todos los políticos prometen cosas que, muchas veces, no son capaces de cumplir, y todo parece indicar que AMLO va en esa misma dirección, sobre todo con sus políticas económicas, que unos las han considerado proteccionistas.
En “Justicia Social Injusta” (editorial Ariel) el profesor de Economía Política, Luis Pazos, éste analiza cómo la justicia social transgrede el derecho humano de la propiedad, algo que ya empieza a suceder en la administración obradorista.
Pues desde la perspectiva del profesor, un país democrático corre peligro cuando su gobierno decide quitarle al que tiene más para dárselo al que padece lo contrario, porque da pie a una burocracia improductiva.
Incluso, hace una revisión a los casos de Argentina, España y México, donde, en algún momento de la historia, el aumento al gasto social propició que se hicieran expropiaciones, elevar los impuestos, pero reduciendo los incentivos para la producción.
