Tal parece que los “caprichos” del presidente Andrés Manuel López Obrador están por encima de cualquier daño ambiental que puedan causar a flora y fauna, tal como lo revela el estudio de Impacto Ambiental de la Refinería Dos Bocas de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA).
La institución que realiza sus actividades independientes a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) informó este mediodía que según sus datos la construcción de la refinería afectaría en la distribución de agua en el municipio de Paraíso, Tabasco, y se generarían grandes emisiones contaminantes.
“Dentro de los impactos se identificaron: Alteración de la calidad del agua pluvial. Modificación de las escorrentías que conducen aguas pluviales. Alteración de la calidad de agua pluvial que se infiltra al subsuelo. Consumo de agua; generación de emisiones contaminantes y partículas suspendidas en el aire. Además de Generación de ruido”, explica estudio.
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Asimismo, la ASEA enumeró las principales actividades que afectarían el entorno de la construcción: desmonte, despalme y actividades para el mejoramiento del suelo afectarían el agua, aire, suelo, geomorfología, vegetación y fauna.
