El Banco de México (Banxico) elevó su previsión de la inflación general para el último trimestre del año, al pasar de 6.4 a 8.1 por ciento, al advertir que los efectos de choques sobre los precios podrían tener una duración mayor a la estimada o incluso agudizarse.
Esto quiere decir que los altos precios en bienes y servicios se mantendrán en lo que resta del año, recordando que en la primera quincena de agosto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) llegó hasta 8.62 por ciento, el nivel más alto desde hace 22 años en nuestro país.
En su informe trimestral, el Banco Central redujo drásticamente su estimación de crecimiento del PIB para 2023 a 1.6 por ciento desde el 2.4 por ciento previo.
“La revisión para 2023 refleja el escenario más adverso que se espera que la economía mexicana enfrente para su crecimiento”, expuso Banxico en su informe.
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La autoridad bancaria prevé que la inflación general alcance un 8.1 por ciento en el cuatro trimestre de 2022 y la subyacente, un 7.6 por ciento, desde la estimación previa de 6.4 por ciento para la primera y 5.9 por ciento para la segunda.
Para el cierre del próximo año, la estimación de inflación se mantuvo en 3.2 por ciento.
Por último, espera que la inflación general anual alcance su “pico” en el tercer trimestre de este año, lo cual podría ocurrir en septiembre, cuando promediaría 8.5 por ciento, casi el triple de la meta de Banxico de tres por ciento, para después descender en lo que resta de 2022 y a lo largo de 2023.
Con información de Forbes México e Infobae
MSA
