Baja California, Aguascalientes, Durango, Tamaulipas y Quintana Roo, podría ser castigadas por la reducción del presupuesto del INE, pues el organismo electoral analiza no instalar casillas en eso estados y dejar a los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLs) asumir toda la organización de sus procesos.
El consejero del INE, Ciro Murayama dijo que es necesario un recurso de 619 millones de pesos para cumplir con sus funciones de instalación de casi 16 mil casillas e integración de mesas directivas en las entidades.
Los recursos, explicó, son necesarios para contratar capacitadores y asistentes electorales, visitar a 1.1 millones de ciudadanos –el 13% de los 9 millones de electores inscritos en las Listas Nominales de esos estados- y capacitarlos para que funjan como funcionarios de casilla el 2 de junio, día de las elecciones.
“Es imposible que las instalemos si no hay recursos y las funciones constitucionales para cumplirse necesitan recursos. Si no hay ampliación, la Cámara ya comprometió eso, no fue una decisión del INE, fue una decisión irresponsable que tiene consecuencias”, apuntó.
