El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, aseguró que elementos de la Fiscalía General de la República (en ese entonces la PGR), lo amenazaron con una pistola en la cabeza para que aceptara los delitos por los que se le acusaban y aceptará el juicio abreviado.
“Me obligaron a hacerlo, ya lo puedo decir, me pusieron la pistola en la cabeza, me obligaron a aceptar la sentencia. Fue la PGR”, aseguró el exgobernador.
Duarte detalló que, en un inicio, las autoridades le advirtieron que, de no aceptar el juicio abreviado, se le impondría una condena de 25 años en prisión.
“O aceptas el juicio abreviado y te vas con esta o te ponemos delincuencia organizada y hacemos una campaña y te quedas toda tu vida en la cárcel”, describió.
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Por otro lado, Duarte negó recibir ayuda de la PGR, pues esta institución ha señalado como sus “prestanombres” a personas que no conoce y con las que jamás ha hablado, como es el caso de Javier Nava.
“Otros no los conozco y realmente no tuve nada que ver en las acciones que ellos dicen. No existe una empresa en donde yo o alguien de mi familia aparezcan. Simplemente están los dichos de estas personas que confiesan haber cometido ilícitos, haber realizado conductas que la ley tipifica como delitos y por el simple hecho de decir que lo hicieron por órdenes mías les dan criterios de oportunidad”, detalló.
