Francia quiere detener el avance de la variante Delta de Covid-19 en su territorio, pero las autoridades se han encontrado con el inconveniente de que muchos jóvenes no se quieren vacunar contra esta enfermedad.
Ante esta situación, el presidente de Francia Emmanuel Macron dio a conocer medidas realmente fuertes para quienes no se quieran vacunar, como no poder entrar a un restaurante, ni cines, museos, aviones o trenes; básicamente, donde haya grupos importantes de personas.
Fue en su columna para López-Dóriga Digital, “¡Me gusta!… ¿se podrá en México?”, donde Víctor Manuel Lambert también aseguró que las personas no vacunadas en el país galo sí podrán asistir a lugares públicos, pero deberán presentar una prueba con resultado negativo que costará 50 euros.
“El Presidente Macron ordenó que todos los trabajadores de la salud deben estar vacunados, si alguna enfermera o Doctor deciden no vacunarse no podrá trabajar y no sólo eso, dejarán de percibir su salario.
“Todas las restricciones caerán sobre aquellos y aquellas que de forma incomprensible no se apliquen la vacuna y expongan o se expongan a contagiarse y tener problemas mayores”, escribió Lambert.
Lambert propuso que este tipo de restricciones se apliquen en México, pero también reconoció que sería complicado, en parte por la sociedad, pero primordialmente por el gobierno que ni siquiera pudo persuadir a las personas para que usarán el cubrebocas.
Con información de López-Dóriga Digital
JZ
