Por: Psic. Ma Elena salazar P.
Ana escucha los latidos de su corazón y siente como brinca en su cuerpo, el sudor recorre su espalda, la vista se le nubla y siente que en cualquier momento puede perder el conocimiento, sólo desea salir corriendo y no tener que hablar en publico.
A pesar de ser una chica inteligente y atractiva suele aislarse, se encuentra más cómoda en su casa en donde le gusta estudiar, escuchar música y hasta bailar. Ana fue diagnosticada con fobia social.
Las fobias son manifestaciones de una ansiedad intensa provocadas solamente por la presencia de un objeto, actividad o situación que en sí mismo es inocuo, pero que para la persona afectada simboliza algo que le produce una gran pánico.
Cuando se presenta alguna fobia, los síntomas más comunes son palpitaciones, aumento de la presión arterial, sudoración, mareo, náuseas, vómito y la necesidad de huir.
En algunos casos, las fobias pueden iniciar en la etapa adulta o desde la niñez. Es común que algunos niños presenten diversas miedos como: a la obscuridad, a monstruos, a brujas y otras imágenes producto de la fantasía.
Un miedo irracional que puede presentarse en la infancia es a los perros, en donde si el niño se cruza con uno sale despavorido sin medir otros peligros a los que se puede enfrentar como pudiera ser el resultar atropellado.
Estos miedos pueden desaparecer con el desarrollo del menor pero si persistieran se requeriría del apoyo de un especialista. Si esta atención no se da entonces las fobias pueden continuar hasta la edad adulta.
Según diversos estudios el 9% de la población en nuestro país presenta algún tipo de Fobia, siendo las más comunes:
- Claustrofobia: miedo a permanecer en un espacio cerrado.
- Agorafobia: miedo a permanecer en espacio abiertos o salir solo.
- Aerofobia: miedo a viajar en avión.
- Aracnofobia: miedo a las arañas.
- Fobia social: miedo a ser juzgado o estar demasiado expuesto en eventos sociales.
Igualmente estos estudios señalan que la población femenina es más vulnerable a presentar una fobia que los hombres.
Las fobias se pueden desencadenar a partir de un hecho traumático pero que sin embargo, el sujeto que la presenta identifica muy bien lo que le provoca el miedo irracional pero no las causas del mismo y tampoco puede controlar el miedo cuando se presenta la crisis.
El manejo y tratamiento de las fobias es mediante la prescripción de medicamentos ansiolíticos y la psicoterapia individual y en grupo con el objetivo de comprender lo que causa el miedo irracional.Y por supuesto que también se requiere del apoyo y comprensión por parte del núcleo familiar.
Con el tratamiento adecuado la mayoría de las fobias desaparecen o disminuyen de manera sustancial.
