La elección de Rosario Piedra Ibarra como nueva directora de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha traído innumerables críticas por parte de la oposición pues aseguran que el propio presidente Andrés Manuel López Obrador ha impuesto a sus favoritos en diversos órganos fundamentales para el funcionamiento del país.
Y es que desde la campaña electoral del tabasqueño la hija de la activista Rosario Ibarra no dudó en mostrar su simpatía – o fanatismo – por el ahora titular del Ejecutivo, aunque tal vez lo hizo con varias carencias al escribir.
Dejen la falta de ortografía. Este es un ejemplo de la autonomía que tendrá la @CNDH.@lopezobrador_ y la 4T son unos farsantes https://t.co/TR6jgVAsRb
— Marco Levario Turcott (@Arouet_V) November 8, 2019
Con ello, se podría dar por extinta la autonomía de la CNDH y deja en evidencia que, aunque al presidente no le gusten los fifís estudiados y con profundo conocimiento del tema, se necesita mucho más que haber vivido una tragedia para manejar una institución que no sólo representa a una persona en todo el país.
