Alejandro Encinas, senador electo de Morena, parece que quiere rectificar sus pasos y redimir sus “culpas”, pues ha decidido cambiar sus banderas para dejar de defender narcos y ahora será el encargado de investigar el caso de los 43 jóvenes de Ayotzinapa.
Propuesto por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, como el próximo subsecretario de Derechos Humanos en la Secretaría de Gobernación, Encinas quiso hacerle “honor” a su nombramiento y aseguró que retomará las líneas de investigación que se quedaron sin desahogar por la PGR.
Pero lo que a Encinas ya se le olvidó, o lo que quiere dar por olvidado, es que fue una de las piezas clave en el caso del narcodiputado, Julio César Godoy, –acusado por la PGR de tener vínculos con “La Familia Michoacana”– a quien ocultó en la Cámara de Diputados por 48 horas, hasta que pudo tomar protesta como legislador y protegerse con el fuero.
Godoy, tomó protesta como legislador del estado de Michoacán, en septiembre de 2010, pese a que la Policía Federal montara un operativo en las inmediaciones del lugar para detenerlo, pero “misteriosamente”, logró pasar el cerco y librarse de su aprehensión.
Ahora, Encinas ha tomado las riendas del caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa, en el que también está involucrado el narco. Ahora tendremos que esperar para saber cuáles serán los resultados de su “investigación”.
