Como ya se ha vuelto costumbre en tiempos de la “Cuarta Transformación”, en solo media hora y sin ninguna modificación, en el Senado de la República aprobaron la militarización del espacio aéreo.
En fast track, con 15 votos a favor, cinco en contra y dos abstenciones, las Comisiones Unidas de Comunicaciones y Transportes; y de Estudios Legislativos, Segunda, aprobaron la Ley de Protección del Espacio Aéreo.
A pesar de las advertencias de los partidos de oposición (PRI, PAN, PRD y MC), la bancada de Morena hizo valer su mayoría y avaló dicho dictamen que, en términos generales, entrega el control total del cielo mexicano a la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena).
Lo que aprobaron Morena y sus aliados cede al Ejército el control, seguimiento de vuelos e intercepción de aeronaves cuando detecte operaciones del crimen organizado. A partir de esta norma se considera asunto de seguridad nacional la vigilancia y protección del espacio aéreo mexicano y las políticas en este rubro serán determinadas por un consejo nacional que presidirá el titular del Ejecutivo y, en su ausencia, el titular de la Sedena.
Esta ley se aprobó bajo el argumento del riesgo a la seguridad nacional que existe actualmente en materia aérea, pues de acuerdo con datos oficiales cada 36 horas se reporta una alerta de seguridad por vuelos relacionados con actividades de la delincuencia organizada, específicamente el narcotráfico.
Aeropuertos, trenes, hoteles y hasta el Metro capitalino, este martes, en solo media hora y sin ninguna modificación, en el Senado de la República aprobaron la militarización del espacio aéreo.
