Miguel Ángel Félix Gallardo, fundador del extinto Cártel de Guadalajara y quien en algún momento fue considerado como uno de los narcotraficantes más importantes de México, reapareció este miércoles, tras estar 32 años preso en la zona de máxima seguridad del penal federal de Puente Grande, Jalisco.
Quien fuera llamado como “el Jefe de Jefes”, reapareció en una silla de ruedas, sordo de un oído y ciego de un ojo.
Durante una entrevista otorgada a Telemundo, el exnarcotraficante admitió que su estado de salud es pésimo.
En ese sentido, detalló que, además de estar ciego en un ojo y que se está quedando sordo, perdió la sensibilidad en algunas partes del cuerpo, y que actualmente, sufre de una neumonía grave, por lo que debe usar oxígeno.
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“Mi salud es pésima, mi familia está haciendo un hoyo para yo ser enterrado en un árbol”, explicó.
Durante la entrevista, y dado a su discapacidad auditiva, la reportera Issa Osorio Ugalde se vio en la necesidad que pasarle las preguntas a Félix Gallardo escritas en papel.
“No tengo pronóstico de vida (…) Yo soy un cadáver el cual no espera más que ser enterrado en la raíz de un árbol”, indicó.
Tras verse involucrado en el secuestro, tortura y asesinado del agente de la DEA, Enrique ‘Kiki’ Camarena, Félix Gallardo fue detenido en abril de 1989 y sentenciado a 40 años de prisión.
Con información de Milenio y La Razón
MSA
