Luego de varias horas de discusión, las comisiones unidas de Hacienda y de Presupuesto de la Cámara de Diputados aprobaron el dictamen de la Ley Federal de Austeridad Republicana, por lo que ahora será turnado a la Cámara de Senadores para que sea aprobado de nuevo.
Con 47 votos en favor y trece en contra más 2 abstenciones, las comisiones aprobaron el dictamen que contenía las 5 modificaciones que la Cámara Alta había propuesto previamente. Esta tienen que ver con el plazo de 10 años que los funcionarios públicos deberán dejar pasar para trabajar en alguna institución privada.
Otro punto aprobado de este dictamen que ha causado revuelo entre los políticos de oposición y algunos sectores de la población, es el de la llamada “partida secreta” que le daría cierto poder al presidente Andrés Manuel López Obrador, para destinar recursos a lo que él quiera.
De acuerdo con la adición al artículo 61 de la Ley Federal de Presupuesto, incluida en el dictamen, “los ahorros generados como resultado de la aplicación de dichas medidas (de austeridad) deberán destinarse a los programas del ejecutor del gasto que los genere; por cuanto hace al Poder Ejecutivo Federal, dichos ahorros se destinarán a los programas previstos en el Plan Nacional de Desarrollo o al destino que por decreto determine el titular”.
