La madrugada de este viernes 17 de julio, el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, llegó a la Ciudad de México, esto luego de ser trasladado desde España y que ahora deberá responder ante las autoridades mexicanas por el escándalo de corrupción del caso Odebrecht.
A su llegada, el exfuncionario público abordó una camioneta, el cual fue escoltado por un convoy de la Fiscalía General de la República (FGR) para dirigirse al Reclusorio Norte, en donde es requerido por un juez federal.
En ese sentido, la camioneta en el cual se trasladaba Lozoya Austin se detuvo por 17 minutos, tiempo suficiente para que reporteros tomaran fotografías las cuales muestras a un sujeto usando un chaleco antibalas, un cubrebocas y una gorra negra.
Sin embargo, diversos medios han denunciado que dicho sujeto que iba a abordo de esa camioneta no era Emilio Lozoya y que en realidad todo se trató de un señuelo para distraer a la prensa.
A esas sospechas se suma la notificación de que el exdirector de la paraestatal mexicana no llegó al Reclusorio Norte y fue trasladado a un hospital privado, luego de que le detectaron problemas de salud.
Le toman fotos durante 17 minutos… y no era Lozoya https://t.co/NAZV8upCmq a través de @El_Universal_Mx
— UR Nuevo Laredo (@URNuevoLaredo) July 18, 2020
¿Será que esto fue un montaje más de la 4T?
Cabe recordar que el gobierno de AMLO ha recurrido a utilizar este tipo de cortinas de humo para distraer la atención de los mexicanos y así nadie viera lo mal que está gobernando.
Por otro lado, no hay que dudar que la 4T utilice al caso de Emilio Lozoya para repartir culpas, seguir destruyendo la democracia mexicana y para otras metas políticas, como por ejemplo limpiar su imagen y demostrarle al país que en realidad están “combatiendo” la corrupción.
Con información de Político.mx
