El pasado miércoles 6 de febrero, en su conferencia de prensa matutina el presidente, Andrés Manuel López Obrador, ofendió al diario Reforma y lo llamó “fifí” —recordemos que en diciembre AMLO aseguró que ya no llamaría “fifí” a nadie”—.
La molestia del mandatario se originó porque el rotativo publicó un reportaje donde señaló que la secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, no declaró un penthouse, ubicado en Houston, Texas, con un valor de aproximadamente un millón de dólares.
Ante tal situación Reforma sufrió un fuerte ataque de bots, que podrían ser dirigidos por Morena —en una acción que atenta contra la libertad de expresión—, algo que ya sucedió en el pasado.
Según la revista Etcétera durante la discusión por el recorte presupuestal a las universidades públicas con el hashtag #AuditoríaALasUniversidades el Movimiento de Regeneración Nacional posiciono dicha tendencia en Twitter con 34 mil 800 tuits, pero 88 por ciento fueron producidos por bots.
La segunda vez sucedió cuando se agudizó el desabasto de gasolina en el país, ya que con la etiqueta #NoMásHuachicoleo,Morena acaparó la discusión a su favor con 83 mil 500 tuits, de los cuales 86 por ciento fueron retuits de bots.
Por tal motivo, periodistas como Carlos Loret de Mola, Marco Levario Turcott, Ernesto Núñez Albarrán y Ricardo Alemán se solidarizaron con el periódico, y pidieron que el gobierno no atente contra la libertad de expresión; mientras criticaron que otros medios no hayan hecho lo mismo.
Hay una estrategia en las redes sociales para acallar las voces críticas al gobierno, el ejemplo de hoy son los ataques contra el diario @Reforma con el TT #ReformaTodoLoDeforma“: Marco Levario Turcott @Arouet_V pic.twitter.com/6WdRDDREbI
— etcétera (@revistaetcetera) February 7, 2019
Desde que nació, en 1993, el diario @REFORMA siempre ha sido crítico de los Presidentes. Son muchos los casos que cuestionaron a los gobiernos de Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña. https://t.co/52Qc6RxBfJ
— Ernesto Núñez Albarrán (@chamanesco) February 7, 2019